En octubre de 2023, llegó un correo electrónico al teléfono de la papirologa Federica Nicolardi con una imagen que transformaría para siempre su investigación, según Nature. La imagen mostraba un fragmento de un rollo de papiro que había sido quemado en la erupción del Monte Vesubio en el 79 d.C. Los resultados más recientes revelaron una tira de papiro repleta de letras griegas ordenadas, brillando intensamente contra un fondo más oscuro. "Fue increíble. Pensé, 'Así que esto realmente está sucediendo’", dijo Nicolardi, según un informe de Nature. En ese momento supo que la papirología nunca sería la misma.
El avance fue parte del Desafío de Vesubio, un proyecto que utilizó inteligencia artificial (IA) para descifrar textos antiguos que habían permanecido ilegibles durante siglos. Brent Seales, un científico de la computación en la Universidad de Kentucky, y sus colegas abordaron la tarea de leer los rollos de Herculano, que no podían verse en absoluto, utilizando redes neuronales para detectar patrones de tinta en los frágiles rollos, según gadgets360.com. Los rollos de Herculano eran parte de un depósito de rollos de papiro enterrados y carbonizados por la erupción del Monte Vesubio, que arrasó las ciudades romanas de Pompeya y Herculano en el 79 d.C. Los rollos fueron descubiertos en los restos de una lujosa villa romana en Herculano en el siglo XVIII, según informó National Geographic.
En la primavera de 2023, un estudiante universitario llamado Luke Farritor, de 22 años, se encontró cautivado por un podcast mientras conducía hacia su pasantía en SpaceX en Starbase, Texas, según National Geographic. Los presentadores del podcast estaban describiendo una competencia con el objetivo de leer un pergamino de 2,000 años de antigüedad sin desenrollarlo físicamente. "Muchas cosas al respecto eran realmente convincentes, la más importante siendo que potencialmente podrías descubrir una nueva biblioteca del mundo antiguo, y eso es algo grande", afirmó Farritor, según un informe de National Geographic. Mientras se enfocaba en los viajes espaciales en su trabajo diurno, Farritor, un estudiante de informática, dedicaba sus noches y fines de semana al Desafío Vesubio.
Los concursantes en el Desafío Vesubio debían desarrollar sus propios programas para interpretar escaneos 3D existentes del pergamino enrollado, siendo el paso de desenrollado virtual el cuello de botella que actualmente limitaba los datos con los que tenían que trabajar, según informó Nature. El principal desafío en la lectura de los rollos de Herculano era aplanar virtualmente los documentos y distinguir la tinta negra de los restos carbonizados para hacer legibles los escritos en griego y latín, requiriendo el trazado de variaciones físicas sutiles para detectar la escritura en el material carbonizado, según Mundo Deportivo. Los escribas de Herculano usaban tinta a base de carbono, invisible en los escaneos porque tenía la misma densidad que el papiro, como señaló Nature.
En febrero de 2024, se otorgó un gran premio: los estudiantes de informática Youssef Nader, Luke Farritor y Julian Schilliger recibieron $700,000 por producir 16 columnas de texto claramente legible, según informó Nature. El equipo ganador utilizó un modelo TimeSformer, una variante del modelo transformador que se usa habitualmente para videos. Se basaron en esta red neuronal para revelar un texto atribuido a una obra filosófica griega antigua. "Tendremos 400 columnas de texto griego que leer", dijo Nicolardi, señalando el desafío para los papirologos al manejar el volumen de texto producido, según informó Nature.
Los académicos que estudian sociedades antiguas oscilan entre el entusiasmo y la duda ante el uso de la inteligencia artificial para traducir documentos escritos hace miles de años, según Folha de Sao Paulo. No hay duda de que la tecnología ya puede hacer mucho y avanzará enormemente. El debate se ha centrado en el potencial técnico de la IA y en si puede sustituir el trabajo humano.
Los investigadores están utilizando redes neuronales para abordar lenguas antiguas para las cuales solo sobrevive una pequeña cantidad de texto. Katerina Papavassileiou en la Universidad de Patras y sus colegas utilizaron una red neuronal recurrente para restaurar texto faltante de 1,100 tabletas micénicas de Knossos, Creta, según informó Nature. Papavassileiou espera utilizar modelos entrenados en Lineal B para abordar Lineal A, un sistema de escritura utilizado por la civilización minoica que comparte muchos símbolos con Lineal B pero que nunca ha sido descifrado.
Señales señaló que el éxito de la inteligencia artificial en estas aplicaciones subraya su papel como complemento a la experiencia humana. "Lo que hace la IA es proporcionar a los papirologistas datos en los que trabajar que de otra manera no podrían tener", declaró Richard Ovenden, jefe de las Bibliotecas Bodleian de la Universidad de Oxford, según informó Nature. Añadió: "Está haciendo que su trabajo sea más importante de lo que nunca ha sido".
A medida que la inteligencia artificial continúa evolucionando, su impacto en la ciencia y la tecnología promete remodelar nuestra comprensión del mundo, con posibles avances en la decodificación de idiomas perdidos y la exploración de bibliotecas subterráneas, según lo informado por Nature. Los investigadores enfatizan la necesidad de colaboración interdisciplinaria y datos de código abierto para garantizar la transparencia y replicabilidad en las aplicaciones de IA para textos antiguos, según gadgets360.com.
En arqueología, los modelos de IA han acelerado el descubrimiento de geoglifos en el Desierto de Nazca en Perú, incluidos símbolos que habían pasado desapercibidos por los arqueólogos.
El artículo fue escrito con la asistencia de un sistema de análisis de noticias.