Fumadores necesitan 25 años en igualar el riesgo cardíaco al de los no fumadores tras dejarlo

Estudios revelan que exfumadores intensos necesitan hasta 25 años para que su riesgo de enfermedades cardíacas se equipare al de quienes nunca fumaron. Descubre los detalles de esta investigación.

 Fumador. (photo credit: Degimages. Via Shutterstock)
Fumador.
(photo credit: Degimages. Via Shutterstock)

Un nuevo estudio de Corea del Sur ha revelado que los fumadores pesados pueden tardar hasta 25 años después de dejar de fumar para que su sistema cardiovascular se asemeje al de alguien que nunca ha fumado. La investigación indica que los fumadores pesados que han fumado al menos ocho años tienen un riesgo similar de ataque cardíaco o accidente cerebrovascular que aquellos que todavía fuman, resaltando los riesgos a largo plazo para la salud cardíaca de los fumadores incluso después de dejar de fumar.

El estudio, publicado en la red JAMA, examinó datos de salud de más de 5 millones de personas en Corea del Sur, incluyendo más de 100,000 ex fumadores y más de 4 millones de personas que nunca han fumado. Los participantes fueron seguidos durante un promedio de 4.2 años. Los investigadores notaron la edad de los ex fumadores, cuántos años tenían cuando comenzaron a fumar, cuántos cigarrillos fumaban al día y la edad en la que dejaron de fumar. También se registró su historial de tabaquismo, incluyendo el número de cigarrillos fumados diariamente y cuándo dejaron de fumar. Se monitorearon sus condiciones de salud, incluyendo ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia cardíaca.

El estudio definió ocho paquetes-año como la mediana que separa a los fumadores ligeros de los fumadores pesados. Un paquete-año se calcula multiplicando el número de paquetes de cigarrillos fumados por día por el número de años fumados. Este umbral se alcanza por alguien que haya fumado un paquete por día durante ocho años o dos paquetes por día durante cuatro años. La cantidad de tabaco consumida antes de dejar de fumar y la duración del cese del tabaquismo son factores importantes para medir el riesgo posterior de enfermedades cardiovasculares.

Los investigadores encontraron que los fumadores pesados que han fumado durante más de ocho años tienen un riesgo similar de sufrir un ataque cardíaco inminente o un derrame cerebral que aquellos que siguen fumando. Para estas personas, podría llevar 25 años que el riesgo de ataque cardíaco y derrame cerebral disminuya al nivel de alguien que nunca haya fumado. "Los ex fumadores pesados deben considerarse con un riesgo de enfermedad cardiovascular equivalente al de los pacientes que continúan fumando", dijeron los autores del estudio, según The Sun.

Por el contrario, aquellos que eran fumadores leves vieron cómo su riesgo de enfermedades cardiovasculares disminuía rápidamente después de dejar de fumar. De cinco a diez años después de dejar el hábito, el riesgo cardiovascular de estos ex fumadores se vuelve casi idéntico al de una persona que nunca ha fumado. Los investigadores enfatizaron que la mejor forma de actuar es nunca comenzar a fumar o dejar de hacerlo lo antes posible, idealmente antes de acumular ocho paquetes-años, con el fin de disfrutar de los mayores beneficios para la salud.

"Esto va en línea con lo que se ha observado y estudiado en el pasado. Los efectos residuales del tabaquismo son igual de riesgosos hasta que el cuerpo se deshace de ellos", dijo el Dr. Ambuj Roy, profesor de cardiología en el AIIMS, Delhi, según The Indian Express. Agregó que los ex fumadores deben cuidar de otras comorbilidades después de dejar de fumar. "Los ex fumadores deben comer bien, evitar factores de riesgo prevenibles como la obesidad, mantener la presión arterial, el azúcar en sangre y los niveles de colesterol bajos. Esta es la única forma de reducir la puntuación de riesgo acumulativo de enfermedades cardiovasculares", dijo el Dr. Roy.

Fumar se sabe que desencadena la inflamación corporal, lo que puede llevar a la acumulación de placa en las arterias. "Fumar puede dañar las paredes de los vasos sanguíneos, estrechándolos. Aumenta su ritmo cardíaco y presión arterial, poniendo en tensión su corazón en el proceso", dijo el Dr. Balbir Singh, de Ciencias Cardíacas, Cardiología en el Hospital Max, Saket, Nueva Delhi, según The Indian Express. Explicó que fumar puede espesar la sangre, creando condiciones para un ataque al corazón. "Fumar puede disminuir el colesterol de lipoproteínas de alta densidad (HDL) o colesterol bueno y elevar su colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL) o colesterol malo junto con los triglicéridos, que son un tipo de grasa en su sangre", agregó el Dr. Singh.

Los químicos en los cigarrillos hacen que las paredes de las arterias se vuelvan pegajosas, y el material graso se adhiere a las paredes. Este material graso puede comenzar a obstruir las arterias y reducir el espacio para que la sangre fluya correctamente. Si las arterias que llevan sangre al corazón se obstruyen, esto puede provocar un ataque cardíaco. Si las arterias que llevan sangre al cerebro se obstruyen, puede provocar un accidente cerebrovascular.

El Dr. Singh señaló que el corazón tarda casi cinco años en experimentar los beneficios de dejar de fumar. "Puede tomar un par de meses o más para que los pulmones se curen, eliminen el moco, el alquitrán y el polvo y tiendan a sentirse sin aliento o con sibilancias", dijo. "Esto suele resolverse en un año y puedes sentir que respiras fácilmente", dijo el Dr. Singh, según The Indian Express.

Según la Fundación Británica del Corazón, después de solo 20 minutos de dejar de fumar, la frecuencia cardíaca y la presión arterial comenzarán a volver a la normalidad. Después de dos o tres días, el sentido del olfato y el gusto comenzarán a mejorar. Después de un año de dejar de fumar, el riesgo de un ataque al corazón es la mitad que el de un fumador. En promedio, los fumadores que dejan de fumar en sus 30 años sumarán diez años a su vida, mientras que incluso dejar de fumar a los 60 puede sumar tres años.

El estudio resaltó que la historia de fumar no es igual para todos; las personas tardan diferentes cantidades de tiempo en curarse después de dejar de fumar. Para algunos, la recuperación puede llevar años, mientras que para otros, puede llevar décadas. Los investigadores enfatizaron que se recomienda dejar de fumar lo antes posible, ya que podría llevar más de dos décadas que la salud del corazón vuelva a la normalidad después de que un individuo deje de fumar.

Fuentes: The Sun, Femme Actuelle, The Indian Express, The Scottish Sun, Youm7 (Entretenimiento)

Este artículo fue escrito en colaboración con la empresa de inteligencia artificial generativa Alchemiq.