El establecimiento de defensa israelí se sorprendió cuando la UNRWA anunció que había sido informada sobre las acusaciones de que empleados de la agencia habían participado en la masacre del 7 de octubre, informó The New York Times el sábado.
Según el informe, los líderes de las FDI quedaron tan sorprendidos cuando un diplomático estadounidense de alto rango se puso en contacto con ellos la semana pasada para solicitar más detalles sobre las acusaciones relacionadas con los empleados de la UNRWA que ordenaron una investigación interna sobre cómo se filtró la información sobre las acusaciones.
Si bien muchos funcionarios israelíes se oponen a la UNRWA, algunos líderes militares no querían ver cerrada la agencia en medio de la crisis humanitaria en la Franja de Gaza.
Según el Times, el 18 de enero, el jefe de la UNRWA, Philippe Lazzarini, se reunió con el diplomático israelí de alto rango Amir Weissbrod en Tel Aviv para una reunión rutinaria y periódica, pero Weissbrod sorprendió a Lazzarini al proporcionarle información sobre la participación de empleados de la UNRWA en la masacre.
Después de la reunión, Lazzarini evaluó las acusaciones y voló a Nueva York para reunirse con el Secretario General de la ONU, António Guterres, y posteriormente despidió a los empleados en cuestión, según un funcionario de la ONU citado por el Times.
Menos de una semana después de la reunión en Tel Aviv, la UNRWA informó a funcionarios estadounidenses sobre las acusaciones, lo que llevó a diplomáticos estadounidenses a pedir al establecimiento de defensa israelí una mayor clarificación. La solicitud de Estados Unidos sorprendió al establecimiento de defensa, ya que no sabían que las acusaciones habían sido proporcionadas a la UNRWA, lo que generó preocupación de que las afirmaciones se estuvieran difundiendo sin una estrategia adecuada.
Los funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores también se sorprendieron por los acontecimientos, ya que no esperaban que los estados donantes reaccionaran tan rápidamente, según un funcionario informado sobre la decisión de proporcionar a la UNRWA las acusaciones, según el Times.
La UNRWA advierte de un colapso inminente
La rápida retirada de fondos ha generado preocupaciones dentro de la ONU de que la UNRWA pueda colapsar, y Lazzarini dijo recientemente que si la financiación permanece suspendida, es probable que la agencia se vea obligada a cerrar sus operaciones a fines de febrero.
La UNRWA ha emitido advertencias repetidamente a lo largo de los años, diciendo que está al borde del colapso y pidiendo a los países que proporcionen cientos de millones de dólares en financiamiento adicional.