El alto funcionario de Hezbolá y miembro del parlamento, Hassan Fadlallah, dijo el jueves que Israel enfrentaría represalias después de dos series de ataques en el sur de Líbano el día anterior que mataron a 10 civiles, la mitad de ellos niños.
"El enemigo (Israel) pagará el precio por estos crímenes", dijo Fadlallah a Reuters cuando se le preguntó sobre la reacción del poderoso grupo armado respaldado por Irán ante el día más mortífero para los civiles en Líbano desde que comenzaron las hostilidades en su frontera sur.
Hezbolá ha estado intercambiando disparos durante más de cuatro meses con el ejército israelí en apoyo a su aliado palestino, Hamas, que llevó a cabo un ataque mortal contra Israel el 7 de octubre que fue respondido con un asalto terrestre, aéreo y marítimo israelí en Gaza.
Hezbolá dice que sus cohetes también están disuadiendo a Israel de llevar a cabo una ofensiva más amplia en Líbano.
Los ataques israelíes del miércoles ocurrieron después de que el bombardeo de una base militar en el norte de Israel mató a un soldado. Hezbolá no se atribuyó la responsabilidad de ese ataque.
Afirmaciones de que las acciones son en protesta por la guerra en Gaza
Fadlallah dijo que Hezbolá tenía "un derecho legítimo a defender a su pueblo y no vacilará en hacer lo necesario para protegerlo" e insistió en que Israel detenga su guerra en Gaza.
El primer ministro interino de Líbano, Najib Mikati, también instruyó al ministro de Relaciones Exteriores, Abdallah Bou Habib, para presentar una nueva queja en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas por los ataques que causaron las víctimas del miércoles.