El Papa Francisco aprobó una nueva edición del 'Ordo Exsequiarum Romani Pontificis', el texto oficial que rige el rito del funeral de un Papa, introduciendo varias modificaciones para simplificar los rituales. Según Fox News, esta nueva edición reemplaza la versión anterior aprobada en 1998 por San Juan Pablo II.
El Vaticano anunció el libro litúrgico revisado para funerales papales después de la muerte del Papa Emérito Benedicto XVI, simplificando los elaborados rituales utilizados para sus predecesores, según lo informó Newsweek. El Papa Francisco recibió el primer ejemplar impreso de la nueva edición después de su presentación.
Estas modificaciones incluyen la simplificación de ceremonias y la eliminación de tradiciones como el uso de tres ataúdes y el catafalco para la exposición del cuerpo. El nuevo protocolo reemplaza los tres ataúdes tradicionales de ciprés, plomo y roble por un solo ataúd de madera revestido de zinc.
Entre los cambios más significativos se encuentra la verificación de la muerte, la cual ahora tendrá lugar en la capilla privada del Papa en lugar de en su dormitorio. Una vez verificado, el cuerpo será colocado directamente en un ataúd de madera con un interior de zinc y transportado a la Basílica de San Pedro sin pasar por espacios intermedios como la capilla del Palacio Apostólico.
Durante la exposición del cuerpo en la Basílica de San Pedro, será presentado directamente en el ataúd abierto, permitiendo al público rendir sus respetos mientras el cuerpo permanece en el ataúd, sin catafalco o la inclusión del báculo papal junto al cuerpo, como era costumbre.
El Arzobispo Diego Ravelli, Maestro de las Celebraciones Litúrgicas, explicó que la estructura interna de las estaciones y los textos de la nueva edición han sido revisados basándose en experiencias de los funerales de los Santos Juan Pablo II y Benedicto XVI. Él enfatizó que el rito renovado tiene como objetivo resaltar que el funeral del Pontífice Romano es el de un pastor y discípulo de Cristo, no de un hombre poderoso de este mundo.
El arzobispo Ravelli dijo, según informó Fox News, que "el Papa Francisco ha afirmado en varias ocasiones la necesidad de simplificar y adaptar ciertos ritos para que la celebración del funeral del obispo de Roma exprese mejor la fe de la Iglesia en Cristo resucitado".
La nueva edición del 'Ordo Exsequiarum Romani Pontificis' introduce indicaciones necesarias para un posible entierro en un lugar distinto a la Basílica de San Pedro, respondiendo al deseo del Papa Francisco de ser enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor en Roma, marcando un alejamiento histórico de la tradición de entierro en la Basílica de San Pedro, según informó el New York Post.
La elección de Santa María la Mayor como lugar de entierro es un gesto significativo hacia la simplicidad, rompiendo con una tradición que data de más de un siglo, reportó Newsweek. El último Papa en ser enterrado fuera del Vaticano fue el Papa León XIII, que fue enterrado en la Basílica de San Juan de Letrán en Roma en 1903, según Fox News.
El Papa Francisco ha expresado su deseo de simplificar los ritos fúnebres papales, afirmando: "Quiero una ceremonia que sea digna pero simplificada, como todos los cristianos."
Las revisiones también incluyen cambios en la terminología. La edición anterior utilizaba la expresión "Summi Pontificis" (Sumo Pontífice), la cual ha sido ahora dejada de lado, y se prefieren los términos 'Papa,' 'Obispo de Roma,' 'Pastor,' y 'Pontífice Romano'.
La letanía de los santos, cantada dos veces, ha sido actualizada con todos los santos presentes en el Calendario General, y la Misa de entierro permite mayor libertad en la elección del repertorio musical.
El Papa Francisco prefiere vivir en la Casa Santa Marta, una casa de huéspedes para clérigos, en lugar del lujoso Palacio Apostólico. Viaja en pequeños autos Ford o Fiat, no en lujosos SUVs.
El Papa Francisco había declarado anteriormente que quería que los papas fueran enterrados "con dignidad" pero no "entre cojines", como se declaró en el libro 'El Sucesor' publicado en abril, reportó CNN.
La nueva edición de los ritos fúnebres papales fue introducida después de la muerte del Papa Emérito Benedicto XVI, reemplazando los rituales anteriores utilizados para su funeral. El Vaticano tuvo que organizar un funeral para el primer papa jubilado en 600 años, el Papa Emérito Benedicto XVI, lo que incluyó una revisión de las experiencias de los funerales de Juan Pablo II y Benedicto XVI que informaron las revisiones necesarias a los ritos fúnebres papales, según informó El Nuevo Día.
Con estos cambios, el Papa Francisco continúa promoviendo su visión de una Iglesia más modesta, incorporando su deseo de "simplificar y adaptar algunos ritos para que la celebración de las exequias del Obispo de Roma exprese mejor la fe de la Iglesia en Cristo resucitado", según informó La Nación.
"Hoy en día se parece más al funeral de un obispo diocesano que al de un emperador romano", dijo Massimo Faggioli, profesor de teología en la Universidad de Villanova.
Este artículo fue escrito en colaboración con la empresa de inteligencia artificial generativa Alchemiq.