La comunidad internacional debe dejar de aplicar estándares dobles cuando se trata de las acciones de las FDI durante la guerra entre Israel y Hamás, dijo el primer ministro Benjamin Netanyahu a la American Israel Public Affairs Committee el martes en un discurso virtual.
"No se puede decir que se apoya el objetivo de Israel de destruir a Hamás y luego oponerse a Israel cuando toma las medidas necesarias para lograr ese objetivo", declaró Netanyahu.
"No se puede decir que se está en contra de la estrategia de Hamás de usar civiles como escudos humanos y luego culpar a Israel por las bajas civiles que resultan de esta cínica estrategia de Hamás.
"Para Israel, cada muerte de un civil es una tragedia. Para Hamás, cada muerte de un civil es una estrategia", dijo.
"Es incorrecto e inmoral someter a Israel a un estándar para evitar bajas civiles al que ningún otro país de la Tierra está sometido", afirmó.
We will finish the job. Watch my speech at the AIPAC policy conference >> pic.twitter.com/QvPEyzfQvc
— Benjamin Netanyahu - בנימין נתניהו (@netanyahu) March 12, 2024
Crece la tensión entre el gobierno de Netanyahu y la administración de Biden
Netanyahu habló en medio de la creciente tensión entre su gobierno y la administración de Biden sobre las políticas de Israel en relación con la guerra de Hamás.
Estados Unidos había esperado finalizar una pausa de seis semanas en la guerra, que permitiría la liberación de unos 40 de los 134 rehenes restantes en Gaza y expandir la ausencia de hostilidades en un acuerdo para un alto el fuego permanente.
En cambio, la continuación de la guerra durante el mes sagrado musulmán del Ramadán, que comenzó el domingo por la noche, ha profundizado la crisis humanitaria en el enclave y aumentado el riesgo de que el combate en Gaza pueda desencadenar una guerra regional.
La comunidad internacional ha presionado cada vez más a Israel para detener la guerra, a pesar de que no ha logrado su objetivo de destruir a Hamás, un objetivo que muchos países, incluidos Estados Unidos, apoyan.
Estados Unidos y la comunidad internacional están particularmente preocupados por la próxima operación militar israelí en Rafah, en el sur de Gaza, que se considera el último bastión de Hamás.
También ha causado preocupación las afirmaciones no verificadas de Hamás de que más de 31,000 palestinos han sido asesinados en la violencia relacionada con la guerra en Gaza. Israel ha dicho que más de 13,000 de las fatalidades palestinas son combatientes de Hamás.
Antes de la guerra de Hamás, al hablar de conflictos modernos, la ONU había dicho que el 90% de las víctimas en tiempos de guerra son civiles.
Sin embargo, el asesor de Comunicaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, ha dicho repetidamente que una sola víctima civil es inaceptable y los expertos de las Naciones Unidas han hablado de un número inusualmente alto de víctimas en esta guerra.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en su mensaje de Ramadán del domingo, dijo que más de 30,000 palestinos han sido asesinados, la mayoría civiles, incluidos miles de niños.
Netanyahu defendió el récord de bajas de Israel en su discurso en AIPAC, explicando que las FDI han "tomado medidas para minimizar las bajas civiles que ningún otro ejército ha tomado en la historia. Solo pregunten al Coronel John Spencer, un experto mundial en guerra urbana, a cargo de la guerra urbana en West Point. Hemos tomado medidas para minimizar las bajas civiles que ningún otro ejército ha tomado en la historia".
Se aferró a la determinación de Israel de finalizar su campaña militar para destruir a Hamás mediante la realización de una operación militar final en Rafah, un movimiento que él dijo es esencial para poner fin a la guerra.
"Para ganar esta guerra, debemos destruir los batallones restantes de Hamás en Rafah. De lo contrario, Hamás se reagrupará, se rearmará y reconquistará Gaza y entonces volveremos al punto de partida. Y esa es una amenaza intolerable que no podemos aceptar", dijo Netanyahu a AIPAC.
"Terminaremos el trabajo en Rafah al mismo tiempo que permitimos que la población civil salga del peligro", afirmó.
En Washington, el asesor de Seguridad Nacional Jake Sullivan dijo a los reporteros que Israel debe presentar un plan creíble para proteger a los palestinos en Rafah antes de lanzar una operación militar allí.
En ausencia de un plan humanitario creíble, la "solución a largo plazo para la estabilidad y la paz en la región no radica en atacar Rafah, donde hay 1.3 millones de personas", dijo Sullivan.
Aclaró que Israel aún no había proporcionado un plan humanitario creíble para Rafah.
"Según las cosas están hoy, no hemos visto cuál es ese plan", dijo Sullivan.