Los países del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas pidieron el miércoles mayores esfuerzos diplomáticos para evitar un conflicto más amplio en Oriente Medio después de que los asesinatos de dos líderes militantes aumentaran las tensiones.
El líder de Hamas, Ismail Haniyeh, fue asesinado en la capital iraní, Teherán, temprano el miércoles, lo que provocó amenazas de venganza contra Israel y alimentó la preocupación de que el conflicto en Gaza se estuviera convirtiendo en una guerra más amplia en Oriente Medio.
El asesinato ocurrió menos de 24 horas después de que el comandante militar más importante de Hezbolá fuera asesinado en un ataque israelí en la capital libanesa, Beirut, en represalia por un mortífero ataque con cohetes en los Altos del Golán ocupado por Israel.
"Temenos que la región esté al borde de una guerra total", dijo el representante adjunto de Japón ante la ONU, Shino Mitsuko, el miércoles, instando a esfuerzos internacionales para prevenir tal conflicto.
China, Rusia, Argelia y otros condenaron el asesinato de Haniyeh, que el embajador de Irán en la ONU calificó como un acto de terrorismo, mientras que Estados Unidos, Reino Unido y Francia señalaron lo que dijeron era el apoyo iraní a actores desestabilizadores en la región.
Fu Cong, embajador de China en la ONU, dijo que la falta de lograr un alto el fuego en Gaza fue responsable de empeorar las tensiones.
"Los países con una influencia importante deben ejercer más presión y trabajar con más vigor... para apagar las llamas de la guerra en Gaza", dijo.
Llamados a la calma y la contención
La embajadora británica en la ONU, Barbara Woodward, instó a la calma y la contención, reiterando un llamado a un alto el fuego inmediato en Gaza. Dijo que Israel y Hamas necesitaban volver a comprometerse con un proceso de paz que resultaría en una solución de dos estados con un Israel seguro y un Estado palestino soberano.
"El camino hacia la paz debe ser a través de negociaciones diplomáticas. La paz a largo plazo no se asegurará con bombas y balas".
Robert Wood, subembajador de Estados Unidos en la ONU, pidió a los miembros del Consejo de Seguridad con influencia sobre Irán "aumentar la presión sobre él para que deje de intensificar su conflicto por poderes contra Israel y otros actores".
El embajador de Irán ante la ONU, Amir Saeid Iravani, dijo que Teherán ha ejercido consistentemente la máxima contención pero se reserva el derecho de responder de manera decisiva. Instó al Consejo de Seguridad a condenar a Israel y castigarlo con sanciones.
El representante adjunto de Israel ante la ONU, Jonathan Miller, pidió al Consejo de Seguridad que condene a Irán por su apoyo al terrorismo regional y aumente las sanciones contra Teherán.
"Nos defenderemos y responderemos con gran fuerza contra aquellos que nos lastimen", dijo Miller, pidiendo al mundo que apoye a Israel.