Las FDI desmintieron las informaciones según las cuales dos batallones de la brigada Nahal y un batallón de la brigada 401 habían sido informados de que en los próximos días serían trasladados a la base militar de Beit Lid en lugar de a la Franja de Gaza, según informó la radio del ejército Kan a primera hora de la mañana del martes.
Los informes sobre el traslado se produjeron después de que unos alborotadores invadieran la base.
La irrupción en la base y los intentos de irrumpir en los tribunales militares se calificaron de incidentes graves. Como consecuencia de estos incidentes, se desplegaron varias compañías de las Fuerzas de Defensa de Israel en la primera fase, y en la segunda llegarán batallones para proteger la base de Beit Lid de los disturbios.
En esta base es donde se está llevando a cabo la investigación de los ocho soldados reservistas sospechosos de haber cometido los delitos. Los alborotadores protestan por la detención de los reservistas de las IDF por la división de investigación criminal por el supuesto abuso de un terrorista de Nukhba que fue detenido inicialmente en Sde Teiman.
La irrupción en la base
Según algunas estimaciones, llegaron 1.200 ciudadanos israelíes y unas docenas de ellos consiguieron entrar, pero fueron desalojados rápidamente.
Tras los sucesos de Beit Lid, la policía anunció: "La policía dispersó en cuestión de minutos a varios manifestantes que irrumpieron en el campus jurídico de Beit Leed. En respuesta a publicaciones y vídeos que circulan por Internet, aclaramos que varios civiles irrumpieron en el campus jurídico de Beit Lid y entraron en la zona del edificio.
"Con numerosas fuerzas policiales desplegadas en el lugar, asistidas por soldados estacionados allí, fueron dispersados en cuestión de minutos fuera de la zona. Estamos trabajando con decisión junto con las negociaciones con los soldados para calmar la situación, pero no permitiremos ataques ni riesgos para las fuerzas de seguridad. Cualquier otra publicación es incorrecta y engañosa para el público".
DARCIE GRUNBLATT ha contribuido a este reportaje