En los últimos años, Israel ha visto un aumento alarmante en los casos de abuso infantil en Israel, impulsado por desafíos sociales y una mayor conciencia, según ELI (La Asociación Israelí para la Protección de la Infancia).
Los trágicos eventos del 7 de octubre han profundizado el trauma y la inestabilidad que se siente en todo el país, especialmente entre los niños. Como uno de los grupos más vulnerables en la sociedad, los niños a menudo luchan por articular sus experiencias de abuso, cargados de vergüenza o miedo. Para muchos, la violencia y la inestabilidad en sus comunidades solo agravan el abuso que sufren en silencio.
Ayuda a los niños israelíes afectados por el 7 de octubre. ¡Apoya a ELI!
Las regiones del norte de Israel, en particular, han visto familias evacuadas de sus hogares, a menudo obligadas a vivir en habitaciones de hotel pequeñas sin mucho apoyo. Muchos padres, al haber perdido sus trabajos y su estabilidad, se encuentran bajo una presión psicológica y financiera inmensa. En algunos casos, esto lleva a comportamientos que antes habrían sido inimaginables, incluidas tendencias violentas hacia sus hijos.
Eran Zimrin, CEO de ELI, destaca cómo las tensiones familiares se han exacerbado debido a las tensiones del desplazamiento y la guerra: "Muchas de las familias evacuadas a hoteles en el sur o el centro del país están luchando por adaptarse. Vivir en una habitación sin certeza sobre el futuro, sin trabajo y con el desgaste emocional de la guerra es inmenso. Desafortunadamente, en algunos casos, esto ha llevado a casos de violencia parental".
Un caso particular involucró al personal del hotel alertando a ELI sobre una niña de 14 años que deambulaba sola. Sus padres fueron encontrados intoxicados en su habitación. La situación de la niña resalta la necesidad desesperada de los servicios de ELI, especialmente en tiempos de crisis.
Zimrin enfatiza que tales informes se han vuelto más frecuentes desde que comenzó la guerra, ya que la interrupción en la vida familiar, el desgaste emocional del conflicto y las dificultades financieras crean condiciones donde padres normales y amorosos pueden perder el control. Esto subraya la necesidad urgente de intervención y apoyo, tanto para los niños como para sus padres, para evitar que estas situaciones se conviertan en traumas a largo plazo.
En respuesta al creciente número de casos, ELI desarrolló un programa escolar de concienciación y prevención del abuso infantil que llega directamente a los niños en sus entornos de aprendizaje.
Este programa se ha vuelto más crucial que nunca. Diseñado para ayudar a identificar y prevenir el abuso, equipa a los niños, educadores y familias con las herramientas necesarias para reconocer el abuso, pedir ayuda e intervenir. En su núcleo, es una forma innovadora de educación entretenida, o "eduentretenimiento", que enseña a los niños sobre los peligros del abuso a través de obras de teatro y musicales. Para los niños más pequeños, el enfoque está en comprender los límites corporales, mientras que los estudiantes mayores aprenden sobre el ciberacoso y el uso seguro de Internet.
A través de estos programas, ELI fomenta un sentido de conciencia entre los niños y sus comunidades, animándolos a dar un paso adelante si necesitan ayuda. Como señala Zimrin, "El problema siempre existe, y lo que ha ocurrido en los últimos años es un aumento en la concienciación, lo que conduce directamente a más casos siendo tratados que antes." Sin embargo, aumentar la conciencia es solo el primer paso. El desafío radica en proporcionar una intervención terapéutica efectiva, especialmente para los niños que ya han experimentado abuso.
El programa escolar de ELI es completo, proporcionando formación para profesionales escolares, discusiones con niños lideradas por trabajadores sociales o consejeros, y apoyo terapéutico para aquellos identificados como víctimas de abuso.
"Recibimos una solicitud personal de un alcalde que fue lo suficientemente sabio como para abordar el problema, a diferencia de otros que simplemente se niegan a reconocerlo", comparte Zimrin. "Cuando las autoridades locales están dispuestas a abordar el problema, tenemos más acceso a salas de terapia. En una ciudad así, aumentamos nuestra disponibilidad de dos salas de terapia a cinco, simplemente porque las autoridades locales estaban al tanto y asumieron responsabilidad".
Este apoyo es esencial para llegar a los niños que de otra manera podrían ser pasados por alto. Zimrin explica: "Si programamos una cita [con los niños], podrían simplemente no presentarse, por lo que nos hemos adaptado para llegar a ellos. De esta manera, la terapia se lleva a cabo, con el beneficio adicional de que conocemos mejor su entorno".
Casi 45 años de experiencia de ELI muestran que a medida que la conciencia aumenta, se identifican más niños y se abordan más casos. Esto requiere una respuesta terapéutica sólida, y ELI está en una posición única para proporcionarla. Su enfoque holístico incluye terapia no solo para el niño sino también para toda la familia, ayudando a romper el ciclo de abuso intergeneracional. "Por lo general, estamos lidiando con ciclos intergeneracionales de violencia. Les mostramos un camino diferente y volvemos a encarrilar ese tren", dice Zimrin.
Este verano pasado, gracias al apoyo de la Agencia Judía, ELI extendió su programa a miles de niños en centros de absorción en el norte, sur y Jerusalén, incluyendo muchos niños etíopes. En un momento de convulsión social, el trabajo de ELI es más crítico que nunca, ofreciendo a los niños y comunidades un camino hacia la seguridad, la curación y un futuro libre de abusos.
El trauma enfrentado por los niños israelíes tras los trágicos eventos del 7 de octubre es inimaginable, y su sufrimiento silencioso no debe ser pasado por alto. Estos niños vulnerables, muchos de ellos viviendo en condiciones inestables y abarrotadas, necesitan una intervención urgente. ELI está en primera línea, brindando un apoyo crítico a través de terapia, educación y programas de prevención que llegan a los niños en las escuelas, comunidades e incluso a las familias desplazadas. Pero no pueden hacerlo solos. Tu apoyo puede marcar la diferencia entre el trauma y la curación. Apoya a estos niños, ayuda a romper el ciclo de abusos y ofréceles esperanza para un futuro más brillante. Dona a ELI hoy y sé el salvavidas para aquellos que más lo necesitan.