Un dron que se infiltró desde Líbano golpeó un edificio en Cesarea el sábado y se reveló el martes que era la residencia del primer ministro Benjamin Netanyahu.
Solo horas antes, un alto funcionario de Hezbollah se había atribuido la responsabilidad del ataque con dron.
Hasta ahora, solo se había informado que el dron fue lanzado hacia su casa, pero no se había revelado que impactó en la estructura. El primer ministro y su esposa no estaban presentes durante el incidente.
Yossi Shelly, Director General de la Oficina del Primer Ministro, visitó la residencia de Netanyahu en Cesarea el domingo. Lo acompañaron el Director de la Autoridad Tributaria, Shai Aharonovitch, y funcionarios de Impuestos sobre la Propiedad para evaluar los daños causados por el ataque.
El dron fue rastreado por un helicóptero de combate, que identificó su infiltración desde Líbano hasta el momento del impacto. Como resultado, se activaron alarmas en Glilot y el norte de Tel Aviv, aunque la aplicación del Comando del Frente Interno no emitió ninguna advertencia.
Dos aeronaves adicionales también violaron el espacio aéreo israelí desde Líbano pero fueron interceptadas en áreas abiertas. El portavoz de las FDI afirmó que está en marcha una investigación sobre el ataque al edificio.
Respuesta de Netanyahu
En respuesta al ataque con drones de Hezbollah, Netanyahu dijo el sábado: "Los representantes de Irán, que hoy intentaron asesinarme a mí y a mi esposa, cometieron un grave error. Esto no me disuadirá a mí ni al Estado de Israel de continuar la guerra de resurgimiento contra nuestros enemigos para garantizar nuestra seguridad para las generaciones venideras".
Agregó: "Le digo a los iraníes y a sus socios en el eje del mal: cualquiera que dañe a ciudadanos israelíes pagará un alto precio. Continuaremos eliminando a sus terroristas, recuperando a nuestros rehenes de Gaza y restaurando la seguridad de nuestros residentes del norte".