El Presidente de la Oficina de Ética de la Asociación Médica de Israel envió una carta oficial al Ministerio de Salud, solicitando la suspensión de la licencia médica de una doctora que celebró la muerte del comandante de las FDI, Coronel Ehsan Daxa, en las redes sociales, informó Walla el miércoles.
La publicación de la Dra. Batla Falah mostraba una imagen de Col. Daxa con el título, "Que este sea el destino de todo criminal - la resistencia es vengada."
La declaración provocó posteriormente una gran indignación entre los profesionales médicos en Israel.
En su carta, el Dr. Yossef Walfisch, Presidente de la Oficina de Ética de la Asociación Médica de Israel, recordó que en 2014 se establecieron directrices claras instruyendo a los médicos a ejercer contención y responsabilidad al expresar sus opiniones en los medios de comunicación y en las redes sociales, especialmente durante períodos políticamente y socialmente sensibles.
'La libertad de expresión es un derecho para todos los ciudadanos'
"La libertad de expresión es un derecho para todos los ciudadanos, incluidos los médicos", escribió el Dr. Walfisch. "Sin embargo, los médicos deben hablar con respeto, tolerancia y responsabilidad, especialmente en contextos profesionales."
Aconsejó a los médicos que consideren cuidadosamente sus palabras antes de hacer declaraciones públicas para evitar dañar la reputación de la profesión.
Antes de esta carta, el Ministro de Salud Uriel Busso también contactó al Director General del Ministerio de Salud y a la Asociación Médica de Israel, solicitando una investigación sobre la Dra. Batla Falah, quien tiene licencia israelí pero actualmente trabaja en el extranjero.
El Ministerio de Salud está considerando suspender la licencia médica de la Dra. Falah, mientras que muchos dentro del sistema de salud están pidiendo regulaciones más estrictas con respecto a las declaraciones públicas de los profesionales médicos.
La Dra. Falah aún no ha respondido a la queja presentada en su contra.
Los profesionales médicos en Israel esperan que este incidente sirva como recordatorio para que los médicos mantengan una conducta profesional incluso fuera de su ambiente de trabajo y eviten declaraciones que puedan socavar la confianza pública en el sistema de salud.