El líder del grupo terrorista libanés Hezbolá dijo el viernes que el ataque de Israel al consulado de Irán en Damasco esta semana marcó un "punto de inflexión" desde el 7 de octubre, cuando Hamas lanzó un ataque contra Israel que ha llevado a una escalada de tensiones regionales.
El ataque en Damasco el lunes mató a siete miembros de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria de Irán, entre ellos un comandante de alto rango de la Fuerza Quds, el general de brigada Mohammad Reza Zahedi. Irán ha prometido venganza.
Hezbolá, respaldado por Irán, ha dicho que apoya el derecho de Irán a "castigar" a Israel, y en declaraciones televisadas el viernes, Sayyed Hassan Nasrallah dijo que la respuesta está en camino.
"Tengan la seguridad de que la respuesta iraní al ataque al consulado de Damasco definitivamente se dirigirá contra Israel", dijo.
Israel se ha preparado para la posibilidad de un ataque de represalia, cancelando permisos para todas las unidades de combate y movilizando más tropas para las unidades de defensa aérea.
Hablando a las fuerzas israelíes en una base aérea el viernes, el Ministro de Defensa Yoav Gallant dijo que Israel está atacando a los enemigos donde decida hacerlo.
"Puede ser en Damasco y puede ser en Beirut", dijo. "El enemigo está siendo golpeado fuertemente en todos los lugares y por lo tanto está buscando formas de responder. Estamos listos con una defensa de múltiples capas."
Irán ha evitado confrontación directa
Hasta ahora, Irán ha evitado entrar directamente en la refriega mientras apoya una serie de ataques contra objetivos israelíes y estadounidenses por parte de sus aliados en toda la región en Líbano, Siria, Yemen e Irak.
Diplomáticos y analistas dicen que la élite clerical de Irán no quiere una guerra total con Israel o Estados Unidos que pudiera poner en peligro su control sobre el poder y preferiría seguir utilizando a sus proxies para llevar a cabo ataques tácticos selectivos contra sus enemigos.
Hezbolá, así como su aliado Amal y grupos palestinos basados en Líbano, han estado intercambiando fuego con Israel a lo largo de la frontera sur de Líbano desde el 8 de octubre.
El sábado, un ataque israelí en la ciudad de Marjayoun mató a tres combatientes de Amal, según fuentes de seguridad y médicas. También han muerto cerca de 270 combatientes de Hezbolá.
Nasrallah dijo el viernes que su grupo aún tenía armas y fuerzas que no había utilizado todavía contra Israel.