"Nuestro problema no es con Israel", dijo Maher Marwan, el nuevo gobernador de Damasco, a NPR en nombre del nuevo líder sirio Abu Mohammad al-Julani.
Tras su rápida toma de control de Siria en 11 días, los líderes de Hayat Tahrir al-Sham (HTS), afiliado a Al-Qaeda, buscan consolidar su legitimidad internacional como la 'nueva Siria'.
En una reunión con Hadeel Al-Shalchi de NPR, Marwan dijo que era "natural" que Israel tuviera preocupaciones sobre el nuevo gobierno sirio y que como resultado de este "miedo", Israel "avanzó un poco, bombardeó un poco".
Marwan añadió que la nueva administración siria no "quiere inmiscuirse en nada que amenace la seguridad de Israel o de cualquier otro país".
Mediación de EE.UU.
Yendo un paso más allá de las declaraciones anteriores de Julani, Marwan pidió a Estados Unidos que facilite mejores relaciones con Israel.
Un funcionario estadounidense le dijo a NPR que Estados Unidos transmitió el mensaje de HTS a Israel.
"Queremos la paz y no queremos ser un oponente de Israel ni de nadie", concluyó Marwan.