Los talibanes de Afganistán enfrentan críticas sobre su historial de derechos humanos en una reunión de la ONU el lunes, con Washington acusándolos de privar sistemáticamente a las mujeres y niñas de sus derechos humanos.
Sin embargo, en una situación incómoda para el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, los actuales gobernantes del país en cuestión no estarán presentes porque no son reconocidos por el organismo global.
Afganistán será representado por un embajador designado por el gobierno anterior respaldado por Estados Unidos, el cual los talibanes derrocaron en 2021.
En una serie de preguntas compiladas en un documento de la ONU previo a la revisión, Estados Unidos preguntó cómo las autoridades responsabilizarían a los perpetradores de abusos contra civiles, "especialmente mujeres y niñas que están siendo sistemáticamente privadas de sus derechos humanos".
También hizo un llamado a la promoción de los derechos de las personas LGBTQ, señalando una "escalada de amenazas y abusos" desde la toma del poder por parte de los talibanes.
Gran Bretaña y Bélgica también plantearon preguntas sobre el trato de los talibanes hacia las mujeres. En total, 76 países han solicitado intervenir en la reunión.
Los talibanes afirman que respetan los derechos de las mujeres según su interpretación de la ley islámica
Los talibanes dicen que respetan los derechos de acuerdo con su interpretación de la ley islámica.
Desde que volvieron al poder, la mayoría de las niñas han sido excluidas de la escuela secundaria y las mujeres de las universidades. Los talibanes también han impedido que la mayoría del personal femenino afgano trabaje en agencias de ayuda, cerrado salones de belleza, prohibido a las mujeres entrar en parques y restringido los viajes de las mujeres en ausencia de un guardián masculino.
Bajo el sistema de la ONU, los registros de derechos humanos de los estados están sujetos a revisión por pares en reuniones públicas del Consejo de Derechos Humanos con sede en Ginebra, lo que resulta en una serie de recomendaciones.
Aunque no son vinculantes, estas pueden llamar la atención sobre políticas y aumentar la presión para la reforma. El Consejo de Derechos Humanos de la ONU, el único órgano intergubernamental global diseñado para proteger los derechos humanos en todo el mundo, también puede ordenar investigaciones cuyas pruebas a veces se utilizan ante tribunales nacionales e internacionales.