El ministro de Defensa, Yoav Gallant, se reunió con el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, al cierre de esta edición. Emitió una declaración en la que señalaba que, al mismo tiempo que su reunión, el jefe de Hamás, Ismail Haniyeh, se encontraba en Teherán reunido con los dirigentes iraníes.
Gallant dijo que esta yuxtaposición de reuniones y lealtades era "la señal más clara de que hay una guerra entre el mundo libre y el eje que promueve el terror".
El ministro de Defensa afirmó que Israel, Estados Unidos y otros aliados debían "aunar esfuerzos utilizando medios tanto militares como diplomáticos, y elevar la presión militar" contra Hamás para convencerle de que libere a los aproximadamente 70 rehenes israelíes vivos más los aproximadamente 60 restos que mantiene retenidos.
Dijo que discutieron cómo gestionar las siguientes fases de la guerra, cómo devolver a los rehenes y cómo mantener la ventaja militar cualitativa de Israel sobre sus adversarios en la región.
A pesar del retrato optimista que hizo Gallant de la reunión, justo antes de que ambos hombres iniciaran su encuentro, Austin afirmó que era un imperativo moral y estratégico proteger a los civiles palestinos, calificando la situación en Gaza de "catástrofe humanitaria", mientras las relaciones entre el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el Primer Ministro, Benjamin Netanyahu, se hundían a mínimos de guerra.
La Secretaria de Prensa del Pentágono, Sabrina Singh, declaró: "El Secretario de Defensa Austin ha recibido hoy en el Pentágono al Ministro de Defensa israelí Gallant en su primera visita a Washington en su cargo actual. El Secretario y el Ministro Gallant afirmaron su interés común en derrotar a Hamás. Discutieron la importancia de dar prioridad a los civiles en Rafah, la grave situación humanitaria en toda Gaza y las amenazas a la seguridad regional."
"El Secretario subrayó que Estados Unidos e Israel tienen un imperativo moral y un interés estratégico compartido en salvaguardar a los civiles, señalando que cualquier asalto a Rafah no debe proceder sin un plan creíble y aplicable que garantice la seguridad y el apoyo humanitario a los civiles allí refugiados. El Secretario también instó al Ministro Gallant a ampliar los puntos de entrada de la ayuda humanitaria y a abordar los problemas de distribución dentro de Gaza. También reiteró el compromiso del Departamento de establecer un corredor marítimo temporal para proporcionar ayuda humanitaria a la población de Gaza", añadió Singh.
Netanyahu cancela sus delegaciones en Washington tras la votación del CNU
La reunión entre ambos se produjo después de que Netanyahu cancelara el lunes otra visita a Washington de dos de sus más altos asesores, Tzahi Hanegbi y Ron Demer, que debían escuchar las ideas de Estados Unidos sobre alternativas operativas para eliminar los cuatro batallones de Hamás en Rafah, en Gaza.
Las tensas relaciones de Netanyahu con Biden han alcanzado un nuevo punto más bajo tras la decisión de Washington de no vetar una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que buscaba un alto el fuego inmediato en Gaza, que a su vez se produjo tras meses de frustración por parte de Biden por el hecho de que Netanyahu ni intentara poner fin a la guerra, ni elaborara un plan para "el día después" de que las IDF se retiraran de Gaza, ni ideara formas de aumentar exponencial y rápidamente la ayuda humanitaria en Gaza.
Gallant no respondió a las críticas de Austin in situ ni las mencionó en su declaración a la prensa.
La declaración de Austin puso de manifiesto lo difícil que le resultará a Gallant convencer a Austins de que la crisis humanitaria de Gaza no es ni mucho menos tan grave como la pintan la ONU y los medios de comunicación.
Además, se especula con la posibilidad de que Austin y Estados Unidos, en lugar de acelerar la ayuda militar a Israel en el futuro, lo hagan lentamente, hasta que Biden sienta que Israel se toma más en serio sus principales prioridades.
Al mismo tiempo que Netanyahu ha perdido más apoyo político en Israel, el líder de su principal partido de la oposición, el Partido de Unidad Nacional, Benny Gantz, ha seguido apoyándole sobre la necesidad de invadir Rafah a pesar de las objeciones estadounidenses.
Austin dijo que discutiría enfoques alternativos para atacar a los militantes de Hamás en Rafah.
El alto funcionario de Defensa dijo que Austin discutió posibles medidas como el ataque de precisión de Israel contra combatientes de Hamás en Rafah.
La amenaza de una ofensiva de este tipo ha aumentado las diferencias entre los estrechos aliados Estados Unidos e Israel y ha suscitado dudas sobre si Estados Unidos podría restringir la ayuda militar si Netanyahu desafía a Biden y sigue adelante de todos modos.
Austin dijo que el vínculo de seguridad entre Israel y Estados Unidos era "inquebrantable".
"Estados Unidos es el amigo más cercano de Israel, y eso no cambiará", añadió.
Por otra parte, el Secretario de Estado estadounidense, Antony J. Blinken, se reunió con el Viceprimer Ministro y Ministro de Asuntos Exteriores iraquí, Dr. Fuad Hussein. Ambos dirigentes reafirmaron su compromiso con el proceso de la Comisión Militar Superior, que permitirá la transición a una asociación bilateral duradera en materia de seguridad entre Irak y Estados Unidos y contribuirá a garantizar la derrota duradera del ISIS.