A pesar de la firme oposición de la Iglesia Católica al aborto, una mayoría significativa de católicos estadounidenses — aproximadamente el 60% — cree que el aborto debería ser legal, según una encuesta reciente realizada por el Centro de Investigaciones Pew. Este grupo incluye al 39% que apoya la legalidad en la mayoría de los casos y al 22% que cree que debería ser legal en todos los casos. Por el contrario, alrededor del 40% de los católicos piensan que el aborto debería ser ilegal en la mayoría (28%) o en todos (11%) los casos.
Estas opiniones sobre el aborto correlacionan estrechamente con las afiliaciones políticas dentro de la iglesia. Entre los católicos demócratas, el 78% aboga por el derecho legal al aborto en la mayoría o en todos los casos, en marcado contraste con el 43% de los católicos republicanos que comparten esta postura. Esta división política destaca la compleja interacción entre creencias personales e ideologías partidistas.
Cambios demográficos en la comunidad católica
La encuesta también reveló cambios demográficos significativos y variaciones regionales dentro de la comunidad católica estadounidense. La población es cada vez más diversa, con los hispanos constituyendo el 33% de los católicos estadounidenses, un aumento acompañado de una disminución correspondiente en los católicos blancos del 65% al 57% desde 2007. Geográficamente, la distribución de los católicos varía, con diferencias significativas en la composición racial y étnica en diferentes regiones. Por ejemplo, el noreste y medio oeste son áreas predominantemente católicas blancas, mientras que el sur y oeste tienen proporciones más altas de católicos hispanos.
La edad y la educación también delimitan el perfil demográfico católico. La encuesta reveló que casi el 60% de los adultos católicos tienen más de 50 años, con una diferencia notable entre los católicos blancos y hispanos en este grupo de edad. Además, el nivel educativo varía ampliamente dentro de la comunidad; el 39% de los católicos blancos tienen al menos una licenciatura en comparación con solo el 16% de los católicos hispanos.
Las prácticas religiosas y la afiliación política también varían entre los católicos estadounidenses. Mientras que el 28% asiste a Misa semanalmente, esto es menos que el 40% de los protestantes estadounidenses que lo hacen. El 52% de los católicos practica la oración diaria, y el 46% considera que la religión es muy importante en sus vidas. Políticamente, la comunidad está casi equitativamente dividida entre aquellos que se alinean con el Partido Republicano (52%) y el Partido Demócrata (44%), con preferencias distintas evidentes entre los católicos blancos y hispanos.