Estados Unidos advirtió a Israel que no intensifique la guerra entre las FDI y Hezbolá, mientras busca soluciones diplomáticas a la violencia en las fronteras sur y norte de Israel.
"El mensaje a Israel es, no hagas nada en el Norte", dijo el portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Matthew Miller, mientras el enviado especial del Presidente estadounidense Joe Biden, Amos Hochstein, visitaba Israel el lunes, con planes de dirigirse al Líbano el martes.
"No queremos en absoluto una escalada en el Norte. Se lo hemos dejado claro directamente al Gobierno de Israel", declaró Miller.
Señaló que "los ataques de Hezbolá desde el sur del Líbano contra Israel son insostenibles", al igual que la situación de los civiles libaneses que sufren las consecuencias de la violencia transfronteriza.
"Por tanto, es una situación que debe resolverse. Pero nuestra preferencia es que se resuelva por la vía diplomática y ésa ha sido la preferencia de Israel, así lo han manifestado pública y privadamente", declaró.
El asesor de comunicaciones de Seguridad Nacional de EEUU, John Kirby, dijo a la prensa en Washington que la Casa Blanca no quería ver un segundo frente en el norte de Israel.
“Estamos preocupados por ello,” dijo, añadiendo que esta es la razón por la que Hochstein está en la región. Si no nos preocupara, no habríamos enviado allí a Amos", añadió.
Haciendo la ronda
Hochstein se reunió con el primer ministro Benjamin Netanyahu, el presidente Isaac Herzog, el ministro de Defensa Yoav Gallant y el jefe del Partido de Unidad Nacional Benny Gantz.
La oficina de Gallant dijo que el Ministro de Defensa había “proporcionado una evaluación de la situación de los acontecimientos en la frontera norte de Israel” haciendo hincapié en los ataques diarios llevados a cabo por Hezbolá contra las comunidades de Israel” y detallando los esfuerzos de las FDI ”para frustrar los terroristas de Hezbolá y la infraestructura. La oficina de Herzog dijo que los dos discutieron los incesantes ataques y disparos de cohetes de Hezbolá, instigados por Irán, contra los pueblos y ciudades del norte de Israel, y la urgente necesidad de restablecer la seguridad en la frontera norte y permitir a los residentes regresar con seguridad a sus hogares.
En Hungría, el ministro de Asuntos Exteriores, Israel Katz, dijo que todo el mundo quiere una solución diplomática para el Líbano, pero que Hezbolá está rompiendo las reglas. Destacó la importancia de asegurar la frontera con el Líbano para garantizar que los miles de israelíes que se vieron obligados a huir de sus hogares el 7 de octubre puedan volver a casa.
Si la diplomacia no es posible, dijo, entonces “sabemos cómo hacer frente a las amenazas y ganar guerras ”si estamos destinados a luchar, lucharemos y derrotaremos militarmente a Hezbolá.”
Miller dijo que la “situación se había agravado en la última semana, con ataques de Hezbolá contra objetivos civiles.
Se refirió a la creencia de EE.UU. de que es necesario un alto el fuego en Gaza para que tenga éxito una solución diplomática en la frontera norte.
“Un alto el fuego en Gaza facilita mucho una resolución en el norte, dado que el alto el fuego [en Gaza] sigue siendo esquivo,” dijo Miller.
Kirby y él hablaron mientras EE.UU. intentaba cerrar un acuerdo de tres fases sobre rehenes y alto el fuego que el presidente Joe Biden dio a conocer el 31 de mayo para garantizar la liberación de los 120 rehenes restantes retenidos por Hamás en Gaza.
Kirby explicó que la administración Biden ha seguido hablando con los mediadores de ese acuerdo – Qatar y Egipto.
“Seguimos creyendo que este es un proceso muy vivo,” dijo.