El ritmo al que Irán está suministrando potentes cohetes a Hezbolá a través del Aeropuerto Internacional Rafic Al Hariri de Beirut se ha disparado, según informó el domingo el dominical londinense Telegraph.
Teherán ya ha pasado armas de contrabando al grupo terrorista libanés por vía aérea en el pasado, y luego las almacenaba en el único aeropuerto comercial del Líbano.
Pero el informe del Telegraph, basado en empleados anónimos del aeropuerto que están furiosos con Hezbolá por mezclar la guerra con su aeropuerto civil, expone claramente que en los últimos meses se ha producido un aumento significativo del uso del aeropuerto para almacenar armas estratégicas.
La idea de utilizar el aeropuerto civil como uno de sus principales depósitos de almacenamiento parece ser una maniobra lateral de Hezbolá tras el desastre de 2020 en el que muchas de sus armas explosivas estratégicas estallaron dentro de su zona de almacenamiento en el Puerto de Beirut.
La explosión destruyó grandes partes de Beirut, mató a casi 220 personas y puso a gran parte de la opinión pública libanesa en contra de Hezbolá durante un tiempo. Hezbolá fue responsable del desastre porque mantuvo los materiales explosivos cerca de zonas civiles.
Sin embargo, Hezbolá logró impedir una investigación completa que podría haber demostrado su culpabilidad, y parece que se limitó a trasladar su depósito de armas a otro lugar civil, el aeropuerto, para despistar a sus acusadores de sus actividades.
Empleados detallan la intimidación y la evasión de sanciones
“El alijo incluye supuestamente cohetes de artillería no guiados Falaq de fabricación iraní, misiles de corto alcance Fateh-110, misiles balísticos móviles y misiles M-600 con un alcance de más de 150 a 200 millas,” decía el informe.
El aeropuerto contiene “AT-14 Kornet, misiles antitanque guiados por láser (ATGM), enormes cantidades de misiles balísticos de corto alcance Burkan y explosivo RDX, un polvo blanco tóxico también conocido como ciclonita o hexágono,” decía.
Además, el informe citaba a empleados del aeropuerto que describían extrañas cajas extragrandes que empezaron a llegar al aeropuerto desde que comenzó la guerra de Gaza.
A pesar de las sanciones, el personal del aeropuerto afirma que Wafiq Safa, segundo al mando de Hezbolá y jefe de su aparato de seguridad, ha frecuentado últimamente el aeropuerto.
“Wafiq Safa siempre aparece en la aduana,” afirmó un informante, citando estrechas relaciones con los gestores de aduanas. <dquo;Siento que si no hacemos lo que dicen, nuestras familias estarán en peligro.
Los empleados del aeropuerto libanés describieron una situación en la que prácticamente son rehenes de Hezbolá, que matará a cualquiera que se interponga en su camino.
Sólo una intervención internacional podría obligar a Hezbolá a devolver el aeropuerto a su estatus puramente civil, dijeron.Hasta ese momento, los empleados libaneses dijeron que les preocupaba que el ejército israelí atacara el aeropuerto porque las armas almacenadas allí se utilizarían contra Israel en la guerra en curso.
Los empleados del aeropuerto libanés describieron una situación en la que son prácticamente rehenes de Hezbolá, que matará a cualquiera que se interponga en su camino.