El ejercicio y el sexo regular y satisfactorio son dos ingredientes importantes para nuestra calidad de vida, pero uno también afecta al otro. Entonces, ¿por qué deberías ponerte en forma cuando se trata de sexo? Aquí están las respuestas.
Muchas personas saben que el ejercicio es importante para una buena salud en general, incluso si personalmente no hacen ejercicio regularmente. Pero, la forma física también tiene un efecto en un componente muy importante en nuestras vidas – el sexo.
Según varios estudios, cerca de la mitad de las mujeres y alrededor de un tercio de los hombres sufren algún tipo de disfunción sexual; la obesidad y la inactividad son los factores que más a menudo influyen. Un estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine encontró que los hombres con un gran perímetro de cintura o un alto IMC tenían un 50% más de probabilidades de sufrir disfunción eréctil, mientras que aproximadamente la mitad de las mujeres con sobrepeso reportaron problemas con la actividad sexual, el deseo y el rendimiento, no todo el tiempo, pero a veces.
Otro estudio de 2021 publicado en The Journal of Sexual Medicine encontró que las mujeres que hacían ejercicio hasta seis horas a la semana, por otro lado, experimentaban un mayor deseo y placer sexual en comparación con las mujeres que no hacían ejercicio, y los vasos sanguíneos en su clítoris también funcionaban mejor. Los ejercicios también mostraron niveles significativamente altos de deseo, excitación y orgasmo.
El sexo es una parte crítica en la vida de muchas personas, y no solo con propósitos reproductivos, y con razón. La calidad de la actividad sexual tiene un gran impacto en la salud mental y emocional, la calidad de vida en general y la fortaleza de nuestras relaciones íntimas.
Entonces, ¿cómo funciona? El ejercicio tiene varios efectos físicos y mentales y mejora la salud en general. El ejercicio regular puede fortalecer nuestro sentido de autoestima y confianza, reducir nuestros niveles de estrés y hacernos sentir tranquilos. Todos estos son factores significativos para nuestro bienestar mental, y también para el sexo y la intimidad.
Un estudio de 2009 publicado en The Journal of Sexual Medicine, por ejemplo, encontró que las mujeres de 18 a 50 años que se calificaron a sí mismas en el cuestionario como teniendo una imagen corporal positiva también tenían una vida sexual más satisfactoria.
A nivel físico, el ejercicio tiene un efecto en los niveles de energía ya que libera dopamina en el cerebro y también ayuda a que la sangre fluya mejor a todas las partes del cuerpo, lo cual ayuda a que los hombres tengan una erección. Además, el sexo es un ejercicio, así que si entrenas varias veces a la semana tendrás la fuerza para hacer más sin que los músculos se agarroten o te quedes sin aliento. Estudios sugieren que, si bien no se queman muchas calorías durante el sexo, las parejas que tienen relaciones en la posición del misionero durante 10 minutos quemarán 90 calorías, que equivalen a unos quince minutos de carrera. Veinte minutos de sexo de pie quemarán alrededor de 200 calorías por persona.