¿No estarías dispuesto a probar una acción simple, aunque algo desagradable, si significara lucir más joven, prevenir la inflamación, reducir los niveles de estrés (que actualmente están altos para todos nosotros) y mejorar el sueño?
Según la Dra. Poonam Desai, experta en medicina antienvejecimiento y longevidad, cambiar tus hábitos de ducha, incluso si no es a diario, puede dar resultados.
La Dra. Desai afirma que tomar duchas de agua fría tiene beneficios significativos para la salud. Entendemos que puede ser difícil, especialmente en días de mucho frío, pero no es necesario convertir cada ducha en un baño de hielo.
La Dra. Desai recomienda tan solo 11 minutos a la semana de exposición al agua fría, lo cual puede aumentar el colágeno, reducir las arrugas, disminuir los niveles de estrés, bajar la inflamación e incluso mejorar la calidad del sueño.
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En un video de Instagram, ella explica los beneficios para la salud que se pueden obtener al dividir la exposición semanal en tres sesiones de dos a tres minutos cada una para evitar poner demasiada presión en el cuerpo.
La Dra. Desai descubrió que este método puede ayudar a prevenir el envejecimiento facial. Dijo que ayuda a reducir las arrugas y mejora la elasticidad de la piel, concluyendo el video instando a los espectadores a incorporar la exposición al frío en su rutina. Es importante tener en cuenta que Desai aconseja consultar a un médico antes de probar esta nueva rutina, especialmente si está embarazada.
La Dra. Desai no es la única que respalda esta opinión. El destacado doctor de televisión Michael Mosley está de acuerdo en que las duchas frías pueden ayudar a reducir el estrés, mejorar la salud del corazón y los vasos sanguíneos, y fortalecer el sistema inmunológico.
Por ejemplo, los investigadores encontraron que los nadadores en agua fría experimentan menos infecciones del tracto respiratorio superior, lo que sugiere que es el agua fría en la que nadan en lugar de su actividad de natación en sí misma.
Si bien los científicos todavía están en las primeras etapas de descubrir los beneficios del sistema inmunológico del agua fría, un estudio demostró que las duchas frías de 30 segundos todas las mañanas durante 60 días podrían reducir el número de días de enfermedad en un 30 por ciento.