Israel y Estados Unidos han estado discutiendo recientemente un plan para el exilio de altos miembros de Hamás como parte de un acuerdo más amplio, según un informe del martes en el Canal 13.
Funcionarios del círculo íntimo del Primer Ministro Benjamín Netanyahu declararon en recientes discusiones a puerta cerrada que ésta es una opción muy favorable para Israel, ya que "la implicación del exilio es el fin del liderazgo de Hamás".
En el pasado hubo informes de una nueva propuesta de los mediadores que incluía el exilio de los líderes de Hamás de la Franja de Gaza a un tercer país. Según el informe, a cambio de esto, Hamás liberaría a todos los cautivos israelíes que tiene, pero lo haría por etapas hasta la retirada de las tropas de las FDI de Gaza.
En los últimos meses, la prensa extranjera ha informado de varias iniciativas similares que arrojan luz sobre las ideas que subyacen al actual esfuerzo diplomático. Hace dos semanas, el periódico francés Le Monde informó que Arabia Saudita está involucrada entre bastidores en un intento de llegar a un compromiso que ponga fin a la guerra en Gaza. Según el informe, los saudíes han creado grupos de expertos en un intento de ofrecer soluciones creativas a la crisis. Un documento confidencial recibido por Le Monde perfilaba un plan cuyo componente central es que el mecanismo para poner fin a la guerra incluya el exilio de los líderes militares de Hamás, que actualmente se encuentran en la Franja de Gaza, en el extranjero, concretamente posiblemente en Argelia.
Argelia, anunciada como posible destino
Según las fuentes entrevistadas por el periódico, el escritor saudita Abd al-Aziz al-Saqr dirigió sus palabras principalmente hacia figuras conocidas como Yahya Sinwar y Muhammad Deif, que fueron definidos como "los líderes militares y de seguridad de Hamás". La propuesta del plan saudí fue presentada a Anne Grillo, directora del Departamento de África del Norte y Oriente Medio del Ministerio de Asuntos Exteriores francés. Según afirma el periódico, Argelia se considera un posible destino para que los líderes de Hamás busquen refugio debido a sus buenas relaciones con Qatar. e Irán, que fueron definidos en Arabia Saudita como los principales valedores de la organización terrorista, así como por lo que se definió como "su capacidad de seguridad" que le permitiría "controlar las actividades de estos líderes".
La idea evoca la expulsión masiva que Israel acordó durante la Primera Guerra del Líbano en 1982, cuando Yasser Arafat y los líderes de la Organización de Liberación Palestina (OLP) fueron expulsados de Beirut por las Fuerzas de Defensa de Israel. En ese momento, los refugiados llegaron a Atenas en un barco de la Armada francesa y de allí se trasladaron a Túnez.