Desde 2017, equipo de arqueólogos de la unidad de Prevención de Robos Arqueológicos del IAA han inspeccionando el desierto de Judea para llegar a hallazgos antes que los saqueadores de antigüedades.
Estos artefactos destacan la sofisticación temprana de las estrategias de combate y conectan los puntos entre el amanecer de la guerra y los mecanismos de defensa avanzados de hoy en día.
En proyecto de excavación sistemática del área del templo en ciudad baja de Gat, un equipo de la Universidad Bar-Ilan ha supervisado reconstrucción de plantas utilizadas en los rituales filisteos.